Secadero de Lúpulo

Lúplo secandose
Lúplo secandose

Como en el proceso de recolección de lúpulo, el secado también es de forma casera, nos hemos ingeniado un secadero de lúpulo que no sigue ninguna teoría sobre el secado de lúpulo, ni a nivel casero ni a nivel industrial. La temperatura de secado intentamos mantenerla entre los 20 y los 24 grados célsius y la duración del secado es de unos 4 días aproximadamente. Pasamos a detallar de que consta la instalación.

  • Somier viejo, pero viejo viejo, de esos de muelles (aunque también valdría de láminas)
  • Tela mosquitera del ancho del somier
  • Ventilador de aire caliente
  • Termostato
  • Sala oscura
  1. En una sala o habitación con poca o nada de luz ponemos nuestro somier, si tiene patas sobre sus propias patas, pero sino calzaremos el somier para ponerlo a una altura de unos 30cm del suelo (lo que vienen a ser la altura del ventilador).

    Somier y mosquitera para secar lúpulo
    Somier y mosquitera para secar lúpulo
  2. Cubriremos el somier con la tela mosquitera.
  3. Colocaremos el ventilador de aire caliente de forma que el aire que expulse lo haga bajo el somier, si podéis, sería interesante tapar los laterales, entre el somier y el suelo, para que todo el aire caliente salga hacia arriba y no se escape por los laterales. Nosotros colocamos el ventilador en uno de los lados cortos (lo que sería el cabecero o pie de la cama), de esta forma el aire caliente subirá a través de la mosquitera y los conos.
  4. Conectaremos el ventilador a un termostato cuya sonda estará sobre los lúpulos y estará programada a unos 22ºC.

Mantendremos los lúpulos más o menos a esa temperatura hasta que estén secos, la parte que más tarda en secar es la interior, donde están las bracteas, así que para ver si están secos abriremos de vez en cuando un cono para ver como van.

Lupulo extendido para secado
Lupulo extendido para secado

Una vez que estén secos, tenemos que recogerlos, prensarlos y envasarlos al vacío para evitar el contacto con la luz y el aire, de esta forma evitaremos la oxidación de los AA y nuestras cervezas no tendrán sabores raros.

Estos lúpulos de los que no tenemos información sobre sus AA los solemos utilizar para aroma al final de la cocción y en algunos casos como lúpulo de adición temprana estimando el amargor que puedan aportar según el rango de alfaacidos que tenga la variedad en cuestión, es decir, si esa variedad tiene entre 10 y 14 %AA tomamos 12%AA como dato al diseñar nuestras recetas.